Esta obra es sin duda alguna, una parte de la recreación de la vida de Gabriel García Márquez, como el resto de sus obras. Estamos ante una novela en la cual el autor retoma historias de algunos personajes que han estado involucrados en el resto de sus obras como en Cien años de soledad, Crónica de una muerte anunciada y sobre todo: La Hojarasca.
Podríamos considerar a esta obra como un mapa, una guía de lectura para toda su obra literaria. Muchos pasajes que se cuentan en la obra van a adquirir una índole, una perspectiva diferente o en su caso van a dar más información acerca de hechos ya contados y mencionados. Por tanto, es fundamental leer esta obra para comprender al autor, sus memorias y su obra.
Según lo dice el propio autor en el prefacio del libro, «La vida no es la que uno vivió, sino la que uno recuerda y cómo la recuerda para contarla». En este libro, García Márquez explica con su particular estilo ―coloquial, crudo e inocente al mismo tiempo― cómo fue su vida en el período comprendido entre su nacimiento (1927) y su partida como corresponsal a Europa (1955), específicamente desarrollando los aspectos de su historia que explican cómo y por qué decidió ser escritor y periodista.